El transporte seguro de cualquier mercancía en un vehículo comercial exige más que simplemente colocar los objetos en el espacio de carga. De hecho, un sistema integral de seguridad tiene como propósito principal la inmovilización de la carga para evitar accidentes y daños. Dentro de este contexto, las barras de sujeción de carga vertical, junto con otros elementos como las guías Airline, son herramientas de gran eficiencia que evitan problemas tanto físicos como legales y materiales. Veamos cómo pueden servirte para mejorar tu día a día.
Las barras de sujeción funcionan como un poste de bloqueo positivo que se fija firmemente, generalmente del suelo al techo o entre las paredes, mediante un mecanismo de tensión. Esta tensión constante, además de amarrar la carga, también la bloquea completamente, eliminando el espacio para el movimiento. Esto es crucial, ya que al conducir, las fuerzas de la inercia pueden convertir la carga suelta en un peligro que compromete la estabilidad del vehículo al tomar curvas o frenar bruscamente.
Sin embargo, para alcanzar la máxima seguridad, es fundamental entender que no todas las barras son iguales y que su eficacia se multiplica cuando se integran en un sistema específico. Por ejemplo, mientras que algunas son telescópicas simples que se ajustan a presión, las soluciones más avanzadas están diseñadas para acoplarse a rieles o guías de amarre especiales, como las conocidas guías Airline o guías fresadas, las cuales permiten ajustarse a las necesidades específicas de cada momento.
Flexibilidad, normalización y normativa europea
El punto de partida de este sistema es el cumplimiento riguroso de las directivas europeas recientes sobre la fijación de la carga. En VALSAT utilizamos componentes de acoplamiento tipo Airline, que son rieles instalados permanentemente en las paredes y suelos de la furgoneta. Estas guías tienen un diseño especial que las hace normalizadas y, por lo tanto, compatibles con una amplia gama de elementos de seguridad, sin importar el fabricante.
Esta flexibilidad total es la principal ventaja. Una vez que se tienen los rieles instalados, las barras de sujeción vertical dejan de ser fijas y pueden reubicarse rápidamente en cualquier punto del recorrido del riel, permitiendo asegurar y dividir cargas de distintos tamaños. Además, a este mismo sistema se pueden enganchar cinturones y correas para atar la mercancía de forma horizontal, creando un ecosistema completo de amarre. En la práctica, esto convierte el vehículo en un espacio adaptable donde se puede asegurar de forma rápida y firme cualquier tipo de mercancía, incluso aquella que no cabe en los espacios fijos de un equipamiento, eliminando las mercancías sueltas que suelen ser causa de incidentes.
Consejos esenciales para un transporte seguro
Para garantizar la máxima seguridad, el uso de las barras debe ir acompañado siempre de buenas prácticas. Un factor fundamental es mantener el centro de gravedad del vehículo bajo. Esto se logra colocando los objetos más pesados en la parte más baja y centrada de la furgoneta. La barra de sujeción ayuda a asegurar esa carga en su sitio ideal, pero la correcta distribución es el paso inicial. Además, antes de cada viaje, es imprescindible verificar el buen estado de la barra, sus anclajes y la superficie de carga. Las barras, fabricadas en materiales robustos como aluminio o acero, deben revisarse para detectar signos de desgaste o daño, y su tensión debe comprobarse regularmente para garantizar que el bloqueo positivo se mantenga durante todo el trayecto.

